¿Las vacunas con timerosal causan autismo?
No existe evidencia científica que apoye esta relación. La OMS ha revisado por más de 10 años (además mantiene un monitoreo constante) los datos científicos sobre el uso de timerosal en vacunas, llegando a la conclusión de que son seguras y su uso no supone un riesgo para la salud17. También, la Academia Americana de Pediatría realizó una recopilación en 2013 con los estudios que demuestran que las vacunas que contienen timerosal son seguras y efectivas, dejando a disposición los estudios para ser revisados.
En Chile, el año 2013, tanto el Comité Asesor de Vacunas y Estrategias de Inmunización (CAVEI) como el Comité Consultivo de Inmunizaciones (CCI) de la Sociedad Chilena de Infectología (SOCHINF) descartaron una asociación entre el timerosal en las vacunas y el autismo.
La asociación Chilena de Medicina realizó en 2014 una revisión rigurosa de todos los documentos científicos que trataron una posible relación entre el timerosal y el autismo, llegando a la conclusión de que no existe evidencia que apoye esta relación18.
Se dejan a disposición dichos documentos para su revisión:
– World Health Organization. Global Vaccine Safety – Thiomersal in vaccines. [En Línea]. Disponible en: http://www.who.int/vaccine_safety/committee/topics/thiomersal/Jun_2012/en/ [Consultada 29.08.2018]
– American Academy of Pediatrics. Vaccine Safety: Examine the evidence. [En Línea]. Disponible en: https://www.aap.org/en-us/Documents/immunization_vaccine_studies.pdf [Consultada 29.08.2018]
– CAVEI. Declaración del Comité Asesor de Vacunas y Estrategias de Inmunización (CAVEI) sobre timerosal en las vacunas. [En Línea]. Disponible en: https://vacunas.minsal.cl/wp-content/uploads/2017/04/2013-CAVEI-INSERTOTIMEROSAL_EL-MERCURIO_final.pdf [Consultada 29.08.2018]
– Comité Asesor de Vacunas y Estrategias de Inmunización (CAVEI). Seguridad del timerosal en vacunas. [En Línea]. Disponible en: https://vacunas.minsal.cl/wp-content/uploads/2014/05/Informe-Seguridad-Timerosal-en-Vacunas-06-junio-2011.pdf [Consultada 29.08.2018].
– Muñoz, A et al. Seguridad de las vacunas que contienen timerosal: Declaración del Comité Consultivo de Inmunizaciones (CCI) de la Sociedad Chilena de Infectología. Rev Chil Infect. [En Línea] 2007; 24(5): 372 – 376. Disponible en: https://scielo.conicyt.cl/pdf/rci/v24n5/art04.pdf [Consultada 29.08.2018]
– Academia Chilena de Medicina. Síntesis de evidencia sobre la seguridad de vacunas que contienen timerosal. [En Línea]. Disponible en: http://www.ipsuss.cl/ipsuss/site/artic/20150707/asocfile/20150707192231/informe_finaltimerosal.pdf [Consultada 29.08.2018]
¿Es seguro aplicar más de una vacuna al mismo tiempo?
Sí, es seguro. Estudios realizados muestran que el sistema inmune humano tiene la capacidad de responder a un número extremadamente grande de antígenos (cualquier sustancia que estimula al sistema inmune para producir anticuerpos contra él, es decir, que no es reconocida por el sistema inmune, por lo que éste la ataca) y se estima, teóricamente, que puede responder a 10.000 vacunas aplicadas al mismo tiempo19.
Las vacunas vivas atenuadas, como las vacunas contra la tuberculosis (BCG), polio oral, sarampión-paperas-rubéola, rotavirus y fiebre amarilla, pueden ser administradas juntas. De no ser así, deben administrarse con un intervalo mínimo de 28 días entre una vacuna y otra, para evitar generar interferencias en la producción de inmunidad20.
¿Pueden las vacunas sobrecargar el sistema inmune de mi hijo?
No. Cada día, el sistema inmunitario se enfrenta con una gran cantidad de microorganismos y es capaz de manejar los desafíos inmunológicos sin mayores problemas. La evidencia científica muestra que las vacunas se comportan como otros factores ambientales (microbios o nutrientes) que favorecen el sistema inmune. De hecho, los niños con cobertura de vacunación completos muestran, en comparación con aquellos no vacunados o poco vacunados, una menor tasa de mortalidad y un mejor estado general de salud21.
De hecho, si se administran las vacunas de acuerdo con los calendarios de inmunización sugeridos, favorecen el desarrollo del sistema inmunitario, mejorando, no solo la protección contra enfermedades que previenen las vacunas, sino que también, contra microrganismos no relacionados20.
Finalmente, las vacunas pediátricas están enfocadas a inducir inmunidad protectora más que a desarrollar respuestas inmunitarias parecidas a las de los adultos. Datos muestran que, por medio de la vacunación, se puede provocar, en más del 90% de los niños a los 7 meses de edad, títulos de anticuerpos protectores contra polio, difteria-tétanos-tos ferina (DTP), Haemophilus influenzae tipo b, virus de la hepatitis B y neumocococo20. De hecho, los recién nacidos pueden desarrollar respuestas innatas y adaptativas contra una enorme cantidad de microorganismos encontrados desde el nacimiento, demostrando que están lo suficientemente desarrollados para generar respuestas de protección y células de memoria efectivas, que son los fines de la vacunación. Además, los adyuvantes y los esfuerzos de formulación pueden ayudar a un sistema inmune inmaduro a desarrollar respuestas específicas de vacuna que no serían provocadas por infecciones naturales.
Si tengo buena higiene y me alimento correctamente, ¿sigue siendo necesaria la vacunación?
Sí, es necesaria la vacunación. Mejorar la higiene y la alimentación son factores que pueden reducir la incidencia de algunas enfermedades, pero no es suficiente para evitar las enfermedades inmunoprevenibles; por ejemplo, el sarampión era una enfermedad “obligada” en la niñez y antes de los 20 años ya habían presentado esta enfermedad más del 90% de la población mundial. Luego de la introducción de la vacuna, entre los años 2000 y 2013, se redujo la mortalidad mundial en 75%. Se estima que, en ese rango de años, la vacuna contra el sarampión evitó 15,6 millones de muertes, lo que la convierte en una de las mejores intervenciones en salud pública22.
Así se demostró que, si bien la higiene y la nutrición son factores importantes para prevenir enfermedades infecciosas, las tasas de estas enfermedades inmunoprevenibles no disminuyeron gracias a estos hábitos, sino gracias a la introducción de las vacunas para esas enfermedades23.
¿A qué me expongo si no me vacuno?
Te expones a ti y a los demás a enfermedades que pueden prevenirse de manera segura a través de la inmunización. Un ejemplo de ello es lo que pasó entre 1970 y 1980, cuando se presentó un aumento drástico de tos ferina por el alza de personas que no se vacunaban en algunos países desarrollados, situación que podría haber sido controlada fácilmente con una cobertura de vacunación adecuada14. Mantener altas coberturas de vacunación asegura que no se propaguen enfermedades.
Otro punto importante es que, al recibir la vacuna, el vacunado evita sufrir la enfermedad y adquiere la memoria inmunológica para actuar de manera oportuna. Esto es relevante para enfermedades cuyos efectos en la salud son muy dañinos, como el polio que causa parálisis o el sarampión que causa neumonía, edema cerebral y muerte22,24.
¿La vacuna antitetánica está siendo dada en los países subdesarrollados para controlar la población?
Falso. Existen algunos sitios en internet que están divulgando rumores de que la vacuna antitetánica contiene la hormona gonadotrofina coriónica (hCG) y que está siendo utilizada para controlar la natalidad en países subdesarrollados25,26,27.
Esta campaña antivacunas nació en México, Nicaragua, Filipinas y Tanzania en 1994 para disuadir a las mujeres de recibir la vacuna contra el tétanos (toxoide tetánico) ya que argüían que la OMS junto a UNICEF estaban usando a mujeres como conejillos de indias en un experimento para probar una vacuna anti-fertilidad, apuntando a países donde el crecimiento de la población era alto. Esta campaña fue promovida por grupos pro-vida (Human Life International) que repartieron esta información por internet, alcanzando más de 60 países alrededor del mundo27.
A partir de la controversia, las vacunas utilizadas fueron sometidas a ensayos en seis laboratorios de cinco continentes utilizando técnicas validadas apropiadamente y todos los estudios mostraron que las vacunas con toxoide tetánico no contenían la hormona hCG27.
Este mito mezcla realidad con fantasía, ya que, efectivamente, en 1992 un grupo de científicos indios liderados por el Dr Talwar estaba investigando una vacuna antifertilidad que utilizaba hormona gonadotrofina coriónica (hCG); la hCG utilizada en el ensayo clínico se acopló con un “portador de proteínas” para estimular la producción de anticuerpos contra la hCG y así evitar el embarazo. En el caso del estudio en cuestión, los portadores de proteínas utilizados fueron toxoides diftérico y tetánico, que están disponibles de forma relativamente barata y se producen en condiciones que los hacen aceptables para uso humano27,28.Es importante aclarar que esta vacuna no es la que se utiliza en los programas de inmunización a la población.
REFERENCIAS
(17) World health organization. Global Vaccine Safety Thiomersal in vaccines. [En Línea]. Disponible en: http://www.who.int/vaccine_safety/committee/topics/thiomersal/Jun_2012/en/ [Consultada 26.06.2018].
(18) Academia Chilena de Medicina. Informe Final: Síntesis de evidencia sobre la seguridad de vacunas que contienen timerosal. [En Línea]. Disponible en: http://www.ipsuss.cl/ipsuss/site/artic/20150707/asocfile/20150707192231/informe_finaltimerosal.pdf [Consultada 26.06.2018].
(19) Offit, P. Addressing Parents’ Concerns: Do Multiple Vaccines Overwhelm or Weaken the Infant’s Immune System? Pediatrics. [En Línea] 2002;109(1): 124 – 129. Disponible en: http://pediatrics.aappublications.org/content/109/1/124?maxtoshow=&HITS=10&hits=10&RESULTFORMAT=&fulltext=addressing+parents%2527+concerns&andorexactfulltext=and&searchid=1&FIRSTINDEX=0&sortspec=relevance&resourcetype=HWCIT [Consultada 31.07.2018].
(20) Nicoli, F. Immunological considerations regarding parental concerns on pediatric immunizations. Vaccine. [En Línea] 2017;35(23): 3012-3019. Disponible en: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0264410X1730508X?showall%3Dtrue%26via%3Dihub [Consultada 31.07.2018].
(21) Mcgovern, M. Vaccination and All-Cause Child Mortality From 1985 to 2011: Global Evidence from the Demographic and Health Surveys. American Journal of Epidemiology. [En Línea] 2015;182(9): 791-798. Disponible en: https://academic.oup.com/aje/article/182/9/791/96333 [Consultada 09.07.2018].
(22) Delpiano, L. Sarampión: la enfermedad, epidemiología, historia y los programas de vacunación en Chile. Rev Chil Infectol. [En Línea] 2015;32(4): 417-429. Disponible en: https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0716-10182015000500008 [Consultada 09.07.2018].
(23) The history of vaccines. Las 20 preguntas más importantes sobre la vacunación. [En Línea]. Disponible en: https://www.historyofvaccines.org/es/contenido/articulos/las-20-preguntas-m%C3%A1s-importantes-sobre-la-vacunaci%C3%B3n#17 [Consultada 09.07.2018].
(24) Casserly, P. Las vacunas y la Salud Pública. Arch Argent Pediatr. [En Línea] 2005;103(1): 72-76. Disponible en: http://www.scielo.org.ar/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0325-00752005000100014 [Consultada 09.07.2018].
(25) Planetarioscom. Planetario Noticias. [En Línea]. Disponible en: https://noticias.planetarios.com/vacuna-tetanos-usada-vector-control-la-natalidad/ [Consultada 31 July 2018].
(26) Dsaludcom. DSalud. [En Línea]. Disponible en: https://www.dsalud.com/reportaje/la-oms-y-unicef-acusadas-de-amparar-vacunas-para-controlar-el-crecimiento-poblacional/ [Consultada 31 July 2018].
(27) Milstien, J. Damage to immunization programmes from misinformation on contraceptive vaccines. Reproductive Health Matters. 1995;3(6): 24-28.
(28) Talwar, G. Anti-hCG Vaccines are in Clinical Trials. Scand J Immunol. 1992;36(11): 123-126.