La vacuna Pfizer BioNTech, reporta una eficacia general del 52% durante tres semanas, entre la primera y la segunda dosis.
En relación con las consultas sobre la posibilidad de contraer COVID-19 tras la inoculación de la vacuna del laboratorio Pfizer, que actualmente se administra en Chile, el Instituto de Salud Pública de Chile reitera que la inoculación con la vacuna de ARN mensajero, no provoca infección, debido a que sólo tiene fragmentos del material genético del virus, esto significa que no existe posibilidad biológica de que provoque la enfermedad ni el contagio de COVID-19.
Es importante que, incluso después de vacunarse, la población mantenga las medidas de prevención indicadas por la autoridad sanitaria, debido a que, como ocurre con otras vacunas, la eficacia que se alcanza con la vacuna Pfizer BioNTech es de un 95%, 7 días después de administrada la segunda dosis. Así mismo, la eficacia general reportada entre la primera y la segunda dosis es de 52%, la que se alcanza 12 días después de la primera dosis en algunas personas.
La vacunación, como se sabe, se ha iniciado con el personal de salud, quienes son los más expuestos al SARS CoV-2, por lo tanto, es esperable que una proporción de personas pueda arrojar una PCR positiva luego de la vacunación, debido a la infección natural que pudo producirse previo a la vacunación o en el periodo de tiempo antes de alcanzar el nivel adecuado de anticuerpos. La vacunación ejerce igualmente un efecto protector en este caso, de modo que esta infección no se traduzca en enfermedad o que los síntomas presentados sean leves.
Asimismo, se informa que, ante la notificación de eventos que generen dudas fundadas sobre la efectividad de la vacuna, la sección Farmacovigilancia de Vacunas del ISP, realizará el seguimiento correspondiente para confirmar o descartar estos casos.