Dada la constante y necesaria innovación del quehacer analítico en la red de laboratorios de salud pública del país, la inclusión de metodologías rápidas y su acreditación ante el Instituto Nacional de Normalización (INN) bajo la NCH ISO 17.025, durante el año 2013 el Instituto de Salud Pública de Chile, en su carácter de coordinador de esta red, apoyará el fortalecimiento de laboratorios para el análisis de Toxinas Marinas en Punta Arenas, Puerto Natales y Porvenir; de Análisis Microbiológico en Santiago; y de Metales Pesados en Aguas, para los laboratorios de Antofagasta y Coquimbo.
Estos laboratorios se suman a las postulaciones que se presentarán en diciembre de 2012 para los laboratorios de Valparaíso, Viña del Mar y San Felipe en la Quinta Región; y en Valdivia en la Región de Los Ríos, los cuales demostrarán que son técnicamente competentes y cuyos resultados se encuentran validados, particulamente en esta primera etapa en el área de microbiología de alimentos.
Estas son parte de las principales conclusiones del V Encuentro de Encargados de Laboratorios Ambientales, organizado por el Departamento de Salud Ambiental del Instituto de Salud Pública de Chile y la División de Políticas Saludables y Promoción de la Subsecretaría de Salud Pública.
La Directora del Instituto de Salud Pública de Chile, Dra. María Teresa Valenzuela, señaló que tras dos años de intenso trabajo de capacitación, supervisión, transferencia tecnológica y asesoría técnica por parte del Instituto de Salud Pública de Chile, “se han logrado identificar las principales fortalezas y debilidades las cuales han sido abordadas en un plan de acción tendiente a responder eficientemente ante las necesidades analíticas que se han presentado a nivel nacional en materia de salud pública ambiental”.
Los 23 laboratorios que conforman esta red en las 15 regiones del país, incluido el Instituto de Salud Pública de Chile (como laboratorio de referencia), aportan una herramienta fundamental para que la autoridad sanitaria tome decisiones correctas en el momento preciso, permitiendo adoptar medidas para la prevención o mitigación de eventos que afecten la salud pública de los ciudadanos.
“Por esto es necesaria la constante modernización e innovación del quehacer analítico, la inclusión de metodologías rápidas y contar con laboratorios acreditados bajo la NCh ISO 17025”, advirtió la Directora del Instituto de Salud Pública de Chile.
En este sentido, la Dra. Valenzuela destacó los lazos establecidos durante el presente año entre el Instituto de Salud Pública de Chile con el Instituto de Salud Pública de Quebec y el Centro de Expertise Medio Ambiental de la provincia de Quebec de Canadá, en el marco de las actividades y compromisos adquiridos entre las tres instituciones en el marco del convenio firmado en marzo recién pasado.
Explicó que las acciones de cooperación en materia de salud ambiental avanzan hacia la acreditación de nuevas áreas de medición de parámetros ambientales de relevancia para la salud, así como también la generación de un área de evaluación de riesgos toxicológicos, insertas todas en la mirada de la evaluación de riesgos.
“La enorme generosidad de nuestros pares canadienses nos ha permitido marcar la hoja de ruta del Instituto de Salud Pública de Chile hacia su modernización, incorporación y reconocimiento en los circuitos de institutos internacionales. Como autoridad me gustaría que todos los laboratorios pertenecientes a nuestra red de laboratorios de salud pública de nuestro país tomaran esta vía, siendo un desafío el que estimo debemos avanzar”, destacó la Dra. Valenzuela.
En este mismo sentido, el Dr. Jaime Jamett, Secretario Regional Ministerial de la V región, ratificó su compromiso con la red de laboratorios, con el modelo de gestión y con la necesidad de generar capacidades analíticas, trazables y comparables, que permitan tomar decisiones en forma oportuna.
En términos generales, el modelo de gestión para la Coordinación de RNLSP considera para su funcionamiento la organización de los laboratorios regionales dependientes de las Secretarias Regionales Ministeriales (SEREMIs), las cuales se agruparán de acuerdo a la similitud de sus características geográficas y ambientales; y, además, su ubicación con las regiones vecinas, generando cuatro macroregiones las que se denominarán como norte, centro, sur y austral. Además, se incluyen los laboratorios privados reconocidos, que tengan la categoría de laboratorios de salud pública de acuerdo a la legislación vigente.